Lo primero que nombra el autor es la existencia
de dos tipos de capitalismo: uno financiero y uno fabril. El primero, regido
por el método de control social del sinóptico y el segundo, por el llamado
panóptico. Plantea la existencia de una sociedad de consumidores caracterizada
por la no existencia de normas y por estar guiada por la continua seducción y
la aparición de deseos y anhelos. Es una sociedad sin modelos a seguir regida
por la comparación universal. A diferencia de la sociedad de productores, la
sociedad consumidora no posee límites y trata de provocar que lo que hoy se
considera lujo, mañana sea una necesidad. Uno se preocupa por “tener la
capacidad de aprovechar la oportunidad cuando se presente”(estar preparado para
absorber lo inusual), poseer un cuerpo “flexible” y adaptable y tener siempre
una tendencia hacia el mas. Esto es, básicamente el concepto de “estar en
forma”(muy diferente, por cierto, a poseer salud. Aunque estos se usen como
sinónimos, hacerlo es erróneo. Poseer salud es el “estado correcto y deseable
del cuerpo”. Este, es el estándar que todos los miembros de la sociedad productora
debe poseer para ser empleable). Estar en forma, es una EXPERIENCIA SUBJETIVA,
es una experiencia difícil de articular de manera adecuada para la comunicación
interpersonal. Al ser un estado subjetivo, implica que sentimientos como la
satisfacción y el placer deben ser “experiencias subjetivas”. Uno nunca sabe si
lo que siente es tan excitante como lo que siente cualquier otra persona a su
alrededor lo que genera profundas inseguridades en los individuos. A diferencia
del cuidado de la salud, esforzarse por estar en forma no posee ningún fin
natural. Es una búsqueda constante y las satisfacciones son escasas. Todos los
que buscan esta, saben que siempre se puede estar mejor, lo que genera
ANSIEDADES (nombra la existencia de una relación entre el sujeto y el objeto,
que se personifica. Hay dos fechas de vencimiento, una, cuando el objeto pasa
de moda y otra, cuando deja de funcionar)
De esta
manera, la modernidad líquida implica cambios constantes y que, se naturalizan
fácilmente. Así “lo que ayer se consideraba normal y satisfactorio, hoy puede
resultar preocupante y hasta patológico y requerir una cura”
La compra como rito de exorcismo
El
individuo posee, como previamente mencionamos, posee una obsesión por estar en
forma. Por consiguiente, posee ansiedades e inseguridades(o angustia) generadas
por motivos varios, como el temor de no encajar en la “normalidad” de la
sociedad. Nace un nuevo concepto, que es el de “exorcismo de los demonios
interiores”, proceso donde uno consume compulsivamente y diariamente teniendo
en cuenta las modas y sin prestar atención a los trucos empresariales como la
doble fecha de vencimiento. Así cita el autor que “cuando un consumidor compra,
no solo hay que ver hacia donde corre sino también de que”
Libertad engañosa
Otro
concepto del autor, en el cual las empresas hacen creer al consumidor que posee
amplia libertad de consumo. No obstante, uno no compra lo que quiere, sino lo
que le hacen creer que quiere. Mediante publicidades, se implantan pensamientos
en los individuos, que cuando “necesitan” comprar algo, tienen la obligación de
elegir dentro de una gama de marcas previamente establecidas por el
capitalismo.
A continuación, dejamos un muy útil video que hizo Chali con respecto al texto de Bauman.
