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2/11/16

Verismo- Música

Corriente musical: Verismo

Introducción:

El realismo y el naturalismo trasladados a la literatura llevaron hacia finales del siglo XIX a la música italiana al llamado verismo (ital. vero, verdadero). La finalidad del naturalismo literario es una plasmación realista del mundo, sin ilusión ni idealización románticas, con la necesaria crítica social entonces en boga. Las música sólo puede ofrecer esto si está condicionada, pues sus medios no cuentan con la palabra y son estilizados. Por eso el verismo hace referencia al argumento de las operas.

La acción, que transcurre a menudo en capas sociales bajas, se presenta apasionada, llevada al límite, con frecuencia brutal, hasta con asesinatos, sangre y horrores para conseguir estremecer. La música tiene cierta brusquedad en su estructura y logra así un fuerte impacto, a menudo con frecuentes típicos. En el verismo la música se doblega totalmente al servicio de la representación de procesos internos y externos. En estos últimos emprenderá el camino hacia el ruido, que se consolidará en el siglo XX, y en los primeros a menudo resulta superficial en su búsqueda de un tosco efectismo, por lo que a los procesos anómicos a menudo les falta profundidad psicológica.

Verdi se distanció del verismo: “Retratar lo verdadero puede ser conveniente. Pero entonces es una fotografía, no una pintura ni un arte”. A menudo le faltó la sutileza en la diferenciación de los personajes, la profundización de los procesos, la dimensión interna de la música, una elevada forma artística. Junto a la Caballeria de Mascagni, la obra más famosa del verismo es Pagliacci (1892; texto: L.) de Ruggiero Leoncavallo (1857-1919). Por su concentrado realismo ambas son óperas breves (con frecuencia se representan juntas)

Compositores destacados del Verismo:
Los más famosos compositores de ópera verista, descontando a Giacomo Puccini, fueron Pietro Mascagni (Cavalleria Rusticana), Ruggero Leoncavallo (Pagliacci, muy a menudo presentada junto con Cavalleria Rusticana) , Umberto Giordano (Andrea Chénier), y Francesco Cilea (Adriana Lecouvreur). Había, sin embargo, muchos otros “veristi”: Franco Alfano (muy conocido por completar Turandot de Puccini), Alfredo Catalani, Gustave Charpentier (Louise), Eugen d'Albert (Tiefland), Ignatz Waghalter (Der Teufelsweg y Jugend), Alberto Franchetti, Franco Leoni, Jules Massenet (La Navarraise), Licinio Refice, Ermanno Wolf-Ferrari, y Riccardo Zandonai. Los compositores de ópera verista italiana integraban un grupo conocido como Giovane Scuola ("escuela joven"). Algunas obras de Verdi son también claramente veristas.